jueves, 11 de junio de 2009

Gritos, sueños y malas noticias

Ayer fué un día de lo más raro y chungo...

Como todas las mañanas desde hace tiempo, vuelvo de trabajar a las 7 se la mañana, desayuno, hablo con mi hermano un rato, subo a mi cuarto, me desvisto, me pongo mi pijama a cuadros de franela, aparto a Muerte (mi gata) un poco para acostarme yo, y escucho un grito de mujer.
Un grito de angustia, miedo, terror y desesperación que me congeló de lo desgarrador que sonaba, la verdad.
Se escuchaba en otra casa, no sé cual, pero dentro del barrio seguro. La mujer gritaba, tomaba aire y seguía gritando entre sollozos de desesperación. Bajo a la planta baja y le pregunto a mi hermano si tiene idea de quién puede ser; me dice que no ha escuchado nada, que estaba en el cuarto de baño. Ante la imposibilidad de hacer nada, subo de nuevo a la planta alta, donde vivo, y me acuesto imaginandome que la mujer que gritaba era una madre que se había levantado para preparar a su hijo pequeño para el colegio y se lo había encontrado muerto. Por eso estaba gritando, me imagino. Vaya... y me compadezco por esa mujer y ese niño. También imaginé que esa mujer, como todas las mañanas al levantarse, ha comprobado en internet los resultados de la lotería que cada día compra y... sorpresa! ésta vez le ha tocado, se ha puesto a gritar y es de esas mujeres que cuando gritan no sabes si es de placer o de dolor. Lo malo es que puedo asegurar que esta vez, lo que esa mujer sentía no podía ser placer.

Me he dormido...

Me he dormido y he soñado que estaba en una casa, una casa moderna y bien equipada, con una bañera grande en la biblioteca, que al mismo tiempo era filmoteca. Me pongo a ojear los libros y películas que habia ahí, y veo libros que sé en ese momento que son obras de arte, aunque no me acuerdo de ninguno. Voy mirando las portadas y veo una de color rojo bermellón, solo rojo, con mi nombre escrito en letras pequeñas y negras en la esquina inferior derecha, y mi firma en el centro de la portada. Lo abro y las ojas están en blanco, salvo algunas páginas centrales en las que hay dibujos que yo he hecho. Me guardo el libro en la mochila y voy a ver los dvds. Todos los dvds son cajas que no tienen ningún disco, pero sí tienen portada, título y sinopsis, y en todas aparece mi nombre en algún lugar. Siento nauseas y vomito sangre encima de los dvds, los libros... todo. Sangre, luego cosas que identifico como confeti de las piñatas y un portaminas que atrapo al vuelo. Lo miro y es mi portaminas azul marca rotring, pero en su pillador, en lugar de la marca, aparece escrita la palabra "excalibur", y empiezo a pensar que estoy loco o estoy soñando. Escucho un grito de mujer, me doy la vuelta y veo a una chica que está en la bañera gigante de antes, acurrucada en una esquina y blandiendo una pastilla de jabón con la que ataca al agua mientras grita y patalea. Voy a ver qué le pasa, y veo que la bañera está llena de pirañas que le comen los gemelos y la parte de atrás de las rodillas. Sin pensarlo dos veces, meto la mano en el agua, agarro las pirañas y las voy lanzando una a una fuera del agua mientras que me mordisquean los dedos arrancándome algunos trozos pero sin hacerme daño. Mientras, las pirañas que ya hay fuera arden y se consumen. Me miro las manos y no les falta nada; en este punto del sueño comprendí que esto era un sueño, y me sentí aliviado.
A partir de este momento, el sueño se hizo muy extraño, y recuerdo que estoy con esa tia en un parque acuático que es de su familia, comemos croquetas de jamón y canapés de salmón con roquefort en un puesto de kebap que había allí en medio (???). Luego fuímos a ver un espectáculo donde lanzaban un gato que se movía como un mono y vestía bañador a la piscina de un tiburón que parecía una ballena. Ponen el gato negro y blanco en bañador en el extremo de un trampolín, hacen que se tire y el tiburón salta y le arranca medio cuerpo al vuelo. El gato nada e intenta huir como si no le hubiese pasado nada y aún tuviese el resto del cuerpo, mira al público que está disfrutando con el espectáculo y entonces grita como un gato cuando le pisas una pata sin darte cuenta. Me mira a mí y yo, sin pensarlo dos veces, cojo (no sé como) al tiburón con la mano y lo lanzo fuera del agua, donde arde igual que lo hicieron las pirañas. La gente huye, supongo que por el fuego, y lo que queda del gato de convierte en montones de arañas con las patas largas que me envuelven y se meten por los ojos, oidos, nariz, ombligo... como si fuera el traje negro de spiderman.
Después solo recuerdo que vivía dentro de un reloj de pared y mi cometido era mover cada segundo sin falta la aguja de los segundos, cada minuto la de los minutos y cada hora la de las horas, pero no sé si esto pertenece al mismo sueño o a otro.

A las 4 de la tarde, cuando me desperté, bajé a orinar y comer algo y me encuentro a mi padre, que me dice:

"tu madre se ha despertado ciega".

2 comentarios:

Anónimo dijo...

q le ha pasado a tu madre?¿?¿?ayer o fue antes de ayer vi a adri ya me ha dicho q tienen nuevo coche pal viernes no?¿?¿...espero q no sea nada gave y no curres tanto ...vader y tomoyo estan hechos unos malotesssssss...besitos bichejooooooo

Anónimo dijo...

ains siempre me orvido de decir quin soy ..ana jajajaja